Este jueves, 23 de noviembre, se realizó la ceremonia de cambio de mando presidencial, en la Asamblea Nacional, donde Daniel Noboa y Verónica Abad fueron posesionados como presidente y vicepresidenta de la República del Ecuador para el periodo gubernamental 2023-2025.
El empresario Daniel Noboa llamó a combatir “la violencia y la miseria” en Ecuador al asumir ayer la presidencia de la nación para un periodo de 18 meses, en los que además deberá lidiar con la inestabilidad política. En su primer día, nombró a 16 ministros.
“Los invito a todos a trabajar en conjunto para acabar con el enemigo en común: la violencia y la miseria”, dijo el nuevo mandatario al terminar un discurso de ocho minutos ante diputados, ministros y familiares en el Congreso. Noboa fue juramentado por el titular del Legislativo, Hen- ry Kronfle, en un acto al que asistió el mandatario colombiano Gustavo Petro.
El suyo, insistió, es un proyecto “pro-Ecuador” y “antinada”, puesto que los “anti” tienen techo y los “pro” son infinitos.
Entre los 16 ministros que nombró hay paridad, con ocho mujeres y ocho hombres, y sólo Niels Olsen en la cartera de Turismo repite cargo tras haberlo sido ya ministro durante el gobierno del ya expresidente Guillermo Lasso.
Autoproclamado de centroizquierda y apoyado por fuerzas de derecha, el hijo del magnate bananero Álvaro Noboa asumió a sus 35 años para convertirse en el presidente más joven de la historia ecuatoriana tras el retorno a la democracia en 1979.
Daniel Noboa fue elegido para terminar el mandato inconcluso del saliente derechista Guillermo Lasso, quien disolvió en mayo el Congreso y dio paso a elecciones anticipadas para eludir un juicio político por corrupción, impulsado por diputados de oposición que formaban mayoría.
A la crisis institucional se sumó la violencia de bandas del narco. “Para combatir la violencia hay que atacar la desocupación, el país necesita empleo y para ello enviaremos reformas urgentes”, advirtió Noboa, que tras la ceremonia en el Legislativo se trasladó a la sede de gobierno, donde le esperaron cientos de simpatizantes.