Moradores del sector compartieron en redes sociales la fuerza con la que pasó el torrente de agua dejando destrucción al paso.
Los vecinos de La Gasca, un barrio ubicado al centro norte de Quito, capital de Ecuador, no durmieron la última noche. Estuvieron quitando los escombros con palas y otras herramientas, atendiendo a heridos, levantando cuerpos y buscando a sus familiares y amigos que no aparecen después de que un aluvión arremetiera contra las casas, construcciones y peatones. Sucedió el último lunes y hasta ahora la cifra oficial alcanza 22 desaparecidos.
Un aluvión es una corriente de agua que arrastra barro y material de todo tipo por una ladera. El aluvión puede recorrer varios kilómetros desde su origen y aumenta de tamaño conforme avanza pendiente abajo. Transporta rocas, hojas, ramas, árboles y otros elementos, alcanzando gran velocidad. En Quito, las lluvias de la tarde del 31 de enero formaron la corriente de agua para que se forme el aluvión. Los vecinos de La Gasca encendieron las alertas al publicar videos en las redes sociales pidiendo ayuda. Algunos incluso habrían estado jugando voleibol en una cancha cuando llegó el aluvión y también los arrastró.