Dos vacunas, la de Pfizer/BioNTech y la de Moderna, han demostrado una efectividad cercana al 95% y han solicitado la autorización de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA). Se espera que a mediados de este mes se conceda la primera autorización y se empiece a administrar de forma inmediata. Las compañías estiman que habrá cerca de 22,5 millones de vacunas disponibles de aquí a final de año y la autoridad médica del país, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han recomendado a los estados que los primeros en recibirla sean los centros de cuidados de largo plazo -como residencias de ancianos- y el personal sanitario en contacto con el virus.
Un representante de George W. Bush dijo más tarde a la cadena CNN que el expresidente republicano de 74 años también estaba dispuesto a promover las vacunas, administrándose la dosis «ante las cámaras», cuando se tenga conocimiento de que las vacunas son «seguras» y se han administrado a los grupos de población más necesitados de ellas.
Y el portavoz de Bill Clinton, Ángel Ureña, dijo asimismo a CNN que el expresidente demócrata, también de 74 años, sería vacunado públicamente «si eso anima a todos los estadounidenses a hacer lo propio».
Obama, de 59 años, dijo que tiene «total confianza» en las autoridades sanitarias del país, incluido el inmunólogo Anthony Fauci, una figura científica muy respetada en Estados Unidos. «Si Anthony Fauci me dice que esta vacuna es segura y puede inmunizar contra el covid, definitivamente la tomaré», dijo en una entrevista de radio en SiriusXM, cuyos extractos fueron compartidos el miércoles en YouTube. «Les prometo que cuando (la vacunación) se haga para personas que corren menos riesgos, la tomaré. Puede que termine haciéndolo en la televisión o que lo filmen, sólo para que la gente sepa que confío en esta ciencia», explicó, en contraposición a las declaración del actual presidente, Donald Trump, que no ha parado de desautorizar a Fauci.